Los recursos naturales son muy importantes porque son la base de la economía y el avance de la sociedad. La utilización eficaz de los recursos y su uso responsable son esenciales para el desarrollo sostenible. El manejo inadecuado de los recursos hace que estos disminuyan, y su escasez da como resultado una crisis económica. La situación mundial es alarmante, el crecimiento exagerado de la población humana incrementa la demanda de los recursos y estos son sobreexplotados sin control. Además, en algunas sociedades son desperdiciados, cuando en otras los necesitan. Por ejemplo se malgasta comida y agua mientras mucha gente muere de hambre y de sed. Existen algunas partes del planeta que consumen muchos recursos, mientras que otras consumen poco. Esta distribución injusta causa problemas ambientales. Las partes del mundo que consumen mucho usan gran cantidad de recursos y energía, que causan problemas ambientales también en aquellas partes donde la gente consume menos. Cuando los recursos renovables limitados son explotados con abuso y sin control, su tiempo de regeneración es menor al ritmo en que los utilizamos, entonces pasan a ser no renovables. Un ejemplo es la utilización en exceso de la pesca, que con el tiempo está convirtiendo los recursos marinos en muy escasos. Si se extraen demasiados peces en un lugar concreto, no habrá peces jóvenes para que crezcan y puedan reproducirse y sostener la población de peces. Entonces si no hay peces para atrapar, la gente de alrededor del lago, río o mar sufrirá las consecuencias y no habrá trabajo ni comida para ellos. Por lo tanto si se continúan sobreexplotando los peces se pueden convertir en recurso agotado, como sucede con la extinción de algunas especies. Eso no es una gestión sostenible, ni para los peces ni para la gente que de ellos depende. A veces también ocurre que el recurso existe pero no se puede utilizar, como pasa con el agua contaminada.
Los recursos naturales renovables son aquellos que, con los cuidados adecuados, pueden mantenerse e incluso aumentar, pero que si son utilizados de manera indiscriminada, pueden llegar a extinguirse. Los principales recursos renovables son las plantas y los animales, los cuales a su vez dependen para su subsistencia de otros recursos renovables que son el agua y el suelo. Pueden ser no limitados, o sea que no se agotan, como la luz solar, el viento o las mareas. Existen también recursos renovables limitados, como los bosques y la pesquería, que si no gestionamos bien se agotaran. Los recursos naturales no renovables existen en cantidades determinadas y al ser sobreexplotados se pueden agotar ya que se regeneran muy lentamente. El petróleo, por ejemplo, tardó millones de años en formarse en las profundidades de la tierra, y una vez que se utiliza ya no se puede recuperar. Si se sigue extrayendo petróleo del subsuelo al ritmo que se hace en la actualidad, existe el riesgo de que se acabe en algunos años. Otros ejemplos son las minerías y el carbón.
RECURSOS NATURALES Los recursos naturales son el conjunto de los elementos existentes en la naturaleza que utilizamos para satisfacer las necesidades humanas y que son valiosos para nuestra vida, bienestar y desarrollo, por eso es muy importante manejarlos adecuadamente. Pueden ser de origen animal, vegetal, mineral y meteorológico como el viento y el sol entre otros. Estos sirven como materias primas y fuente de energía.
El medio ambiente es todo aquello que nos rodea, nos afecta y nos condiciona. Nosotros mismos, las plantas y los animales, el aire, el agua, la tierra e incluso aquello que no tiene vida (volcanes, piedras, suelo, aire y ríos) son parte del medio ambiente. Además utilizamos el medio ambiente para obtener refugio, alimento, construir casas y desplazarnos (como los ríos navegables). El ambiente también acoge nuestros valores sociales y culturales.